miércoles, 9 de junio de 2010

Tal vez


Sentada frente a esta ventana hace un par de días  pasó un hombre que sinceramente ni siquiera llamó mi atención sin embargo rápidamente logro despertar en mi la confianza, se acerco recuerdo bien preguntando por una dirección...

Mi vida en ese momento atravesaba un lapsus tormentoso y difícil, mucha confusión.  El chico en cuestión regreso al siguiente día, con flores en mano y unos ojos llenos de ilusión; al verme sentada aquí se acerco a saludar y a agradecer la ayuda del día anterior a lo cual conteste solo con una sonrisa triste.

Recuerdo que platico conmigo varios días, según recuerdo la llamaba “su musa”, estaba tan emocionado, tan feliz como si hubiese encontrado ese algo que creía perdido, lo escuche y aconseje como su celestina, que hacer, que creer, que haría yo, le di calma en los momentos que creyó perdida su “musa”.

Era inevitable sentir cierto dejo de celos y envidia por aquella mujer, era tan afortunada como creo k yo jamás lo había sido a mis veintitantos... te soy franca siempre creí que yo podía encontrar un hombre para el cual fuera especial y no solo su “compañía”.

Un día no entiendo porque se me acerco con un semblante diferente y cambio de opinión con respecto a su “musa”... me invito a salir, yo pensé que como a cualquier amiga o como agradecimiento,  pero como no entendí la indirecta me dijo bueno en plan de conquista!!!! Con lo cual me dejo en shock...

No sabia que pensar, una broma, un juego... con que intención, para que... y muchas otras cruzaron mi mente, pero al final dije que si...todo era perfecto hasta ahí...

Sin embargo la duda quedo sembrada en mi y no sabia que hacer el primer día me sentí afortunada, deseada, especial, sensación por demás extraña para mi y entonces sucedió... el demonio de la duda y los celos se apoderó de mi, llevándome a actuar como tonta y propiciando que se alejase de mi

Después de esto obvio no quería saber nada de mi e incluso me llamó loca, lo cual me puso mal, me deprimí demasiado... no sabia que hacer, poco a poco deje de verlo y entonces entendí que fue un error, pero que todos los hilos de la vida se mueven y ninguno lo hace al azar... todo tiene un porque y un para que

Ahora me siento frente a esta ventana buscando mi respuesta y que talvez, tal vez la próxima vez todo sea diferente.... tal vez

martes, 8 de junio de 2010

EL PERDON


Dicen que es de sabios cambiar de opinión cosa con la cual tengo mis discrepancias... sin embargo hace unos días la vida me dio una lección que debí aprender de golpe y porrazo, primero me sorprendió y después me caí de la nube en que andaba llevándome sendo madrazo de realidad.

No entiendo muchas cosas tal vez xq soy tonta o simplemente no se como actuar, sin embargo espero haber aprendido la lección y no cometer el mismo error dos veces.

El asunto está así la regué  y feo y me costo mucho darme cuenta de mi error sin embargo lo hice a base de cachetadas de realidad, dolieron y mucho pero dolió mas aun aceptar que como ser humano me convertí como el Dr. Jekyll y Mr. Hyde....

Pelear con nuestros demonios no es fácil, son batallas encarnizadas donde la razón debe vencer... y lo hice Mr. Hyde regreso a su lugar y  con ayuda de buenos amigos me di cuenta que es parte de un todo, que ese lado oscuro al que tanto tememos es parte de nosotros y nos hace ser lo que somos, en esencia somos esa combinación letal.

Pedir una disculpa y asumir que nuestras acciones no fueron lo correctas de deben o pueden ser,  con lleva un proceso de aceptar, asimilar, reconocer y ofrecer una disculpa, un perdón que no cualquiera logra, ni cualquiera acepta.

Es difícil porque primero no somos perfectos, después asimilamos nuestro error y lo ubicamos y entendemos que estuvo mal (aquí esta nuestra cruda moral), después lo mas difícil que es encarar a quien  lastimamos con nuestros arrebatos, mirarle a la cara, a los ojos y decirle de corazón (porque estamos arrepentidos) “lo siento”

La sensación que a continuación se da es de descanso como si un gran peso se hubiera quitado de nuestras espaldas, esa sensación es la recompensa del perdón, de saber que hicimos lo correcto, de que nuestro ser se pone en equilibrio... en santa paz!

El perdón nos hace grandes... la verdad nos hará libres  y si debo citar mas diré que los problemas que enfrentamos no son otra cosa que el aderezo que dará sabor a nuestras vidas (AM).